Temporeras y Plaguicidas.

Los dueños de predios, para ahorrarse dinero en sus trabajadores, no otorgan las medidas necesarias contra los tóxicos de los plaguicidas.
En el documento “Historia de los Plaguicidas”, de Sebastiao Pinheiro, sobre agrotóxicos, explica cómo traen los plaguicidas, como el agente naranja traído de Vietnam, cuyo agente activo es la dioxina, que produce cáncer, afectó a soldados norteamericanos y vietnamitas. El hombre no ha parado en la destrucción.
Los plaguicidas son enviados a América Latina después de la guerra. Como Chile. Es usado extensivamente en selvas amazónicas y otras zonas de vegetación cerrada. Esto ha provocado la aparición de niños con deformaciones.
Las emporesas militares encontraron un nuevo filón: vender laboratorios a los países, universidades y órganos de fiscalización para analizar residuos de agrotóxicos en los alimentos.
En Chile las recolectoras de fruta en su gran mayoría son mujeres jóvenes llamadas temporeras. Las aplicaciones de venenos son tan masivas e indiscriminadas que han aumentado en gran número los casos de malfoirmación congénita. Estudios realizados en la sexta región de Chile, señalan una asociación estadísticamente significativa entre padres expuestos a plaguicidas y niños con malformaciones congénitas, de aproximadamente un cuarenta por ciento.
Las transnacionales actualmente tienen listos sus productos biotecnológicos para la agricultura tradicional, ojo, para lanzarlos al mercado y estos cuestan más caros que los venenos, pues son más modernos.